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Washington, 26 de diciembre de 2025 – En su mensaje navideño dirigido a las fuerzas armadas estadounidenses, el presidente Donald Trump anunció que Estados Unidos llevará a cabo operaciones terrestres contra objetivos de cárteles narcotraficantes en América Latina, enfocándose particularmente en Venezuela.
Según el reporte de DW Español, Trump detalló que estas acciones terrestres seguirán a cuatro meses intensos de bombardeos aéreos y navales en el Caribe y el Pacífico contra embarcaciones dedicadas al narcotráfico, conocidas como "narco-boats". El mandatario afirmó que estos operativos han logrado reducir el tráfico de drogas por vía marítima en un 96%. Fuentes del Pentágono reportan al menos 80 muertos en estas operaciones, aunque otras estimaciones independientes elevan la cifra por encima de los 100.
Expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) han denunciado el bloqueo naval impuesto por Washington a buques petroleros venezolanos, calificándolo como una violación del derecho internacional. Por su parte, China y Rusia han descrito las acciones estadounidenses contra Caracas como un "acoso" sistemático.
En paralelo, desde su residencia vacacional en Mar-a-Lago (Florida), donde pasa las fiestas navideñas, Trump reveló a la prensa que mantiene conversaciones activas con empresas petroleras estadounidenses y europeas sobre posibles operaciones futuras en Venezuela, en el escenario de una eventual salida del poder de Nicolás Maduro.
El corresponsal de DW en Washington, David Alandeta, contextualizó estas declaraciones recordando que Trump ha advertido sobre ataques terrestres dirigidos a Venezuela desde septiembre. Además, se han desplegado equipos de vigilancia y ataque de alta tecnología en bases como Puerto Rico, incluyendo helicópteros y unidades especializadas similares a las empleadas en la operación que capturó a Osama Bin Laden.
Estas medidas forman parte de una estrategia de "máxima presión" contra el régimen de Maduro, que, pese a las predicciones de Trump de que tenía "poco tiempo" en el poder, continúa resistiendo. Analistas prevén que los próximos desarrollos en las semanas venideras podrían intensificar la tensión en la región.
El anuncio ha generado preocupación internacional por sus implicaciones en la soberanía de países latinoamericanos y el riesgo de escalada en un conflicto ya prolongado.
